Terminamos un viejo año y empezamos uno nuevo, sin que al tiempo le importe demasiado el trato que le damos o la percepción que de él tenemos.
Alegría por el nuevo año y nuevos propósitos que pretenden erradicar viejos hábitos. Buenos deseos con buenos amigos en buen ambiente, aderezado con una pizca de superstición, matizada con un ritual de buena suerte- uvas, prendas rojas u oro en el cava-. Otros por el contrario: disgusto por el comer, por el gastar, por las desgracias familiares, por la alegría de los demás, por la tristeza de los otros, en fin por vivir.
Sea como sea, tanto si año nuevo vida nueva, vida continua o vida vieja, la realidad es que lo único que es nuevo en cada instante, somos nosotros mismos. No somos el que fuimos el año pasado, ni somos lo que seremos el próximo año, solo somos lo que somos ahora mismo en el aquí ahora; y me gustaría deciros que si queréis que este año sea diferente, recordad que “si seguimos haciendo lo que siempre hemos hecho, seguiremos teniendo el mismo resultado que hasta ahora hemos tenido”; dicho de otra manera : “Año nuevo vida nueva ,solo si yo me renuevo”
En fin que tengáis un prospero y feliz año.
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lunes, 31 de diciembre de 2007
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